Cápsulas de Omega 3 por 60 Servicios

El aceite de pescado es una fuente natural de ácidos grasos poliinsaturados omega 3 de cadena larga, especialmente DHA y EPA, nutrientes esenciales que el cuerpo no produce en cantidades suficientes. Estos compuestos cumplen un papel clave en la salud y el rendimiento, ya que se incorporan a las membranas celulares, mejoran la síntesis de proteínas musculares, reducen la inflamación y potencian la función cognitiva.

Durante el entrenamiento, los músculos sufren microlesiones que generan inflamación como parte de la adaptación normal. Sin embargo, una inflamación excesiva puede retrasar la recuperación y afectar el rendimiento deportivo. El consumo de omega 3 de aceite de pescado ayuda a equilibrar este proceso gracias a sus propiedades antiinflamatorias: el DHA y el EPA reducen la liberación de citocinas inflamatorias y favorecen la producción de resolvinas, mediadores que aceleran la recuperación.

Además de sus beneficios en el ámbito deportivo y cognitivo, el aceite de pescado con omega-3 contribuye a reducir los triglicéridos y el riesgo cardiovascular, reforzando así la salud integral.

Aunque lo ideal es obtener omega 3 directamente de la dieta, en muchos casos resulta necesario suplementar. Una opción práctica es consumir 2 a 3 gramos diarios, equivalentes a dos cápsulas de omega 3 con el almuerzo. De esta manera, se asegura el aporte adecuado de DHA y EPA para cuidar el corazón, proteger los músculos y apoyar el cerebro.